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Prevention of cardiovascular events in elderly people.

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Resumen:
La enfermedad cardiovascular ha sido identificada como la principal causa de morbilidad y mortalidad en los países desarrollados. Dado el aumento de la esperanza de vida y el desarrollo de medidas de prevención cardiovascular, se ha convertido cada vez más importante para detectar y prevenir las enfermedades cardiovasculares en los ancianos. Hemos revisado la literatura científica relativa a la prevención cardiovascular para evaluar la importancia de las medidas de prevención cardiovascular en edad (> o = 65 años de edad) los individuos. Se realizó una búsqueda sistemática de las referencias relativas a la prevención de la enfermedad cardiovascular en la carrera de ancianos, principalmente isquémica, enfermedad arterial coronaria y la insuficiencia cardíaca, en la base de datos MEDLINE desde 1962 hasta 2005. Para la prevención cardiovascular por las drogas o la cirugía, se hizo hincapié en los ensayos controlados aleatorios, artículos de revisión y meta-análisis. Para la prevención cardiovascular mediante la modificación del estilo de vida, también se consideraron importantes los estudios de cohorte. Accidente cerebrovascular, enfermedad coronaria e insuficiencia cardíaca resultaron ser los principales objetivos para la prevención cardiovascular en los estudios publicados. El tratamiento antihipertensivo ha demostrado su eficacia en la prevención primaria de ictus mortal o no mortal en pacientes hipertensos de alto riesgo y> 60 años de edad, en particular a través del tratamiento de la hipertensión sistólica. La reducción de la presión arterial sistólica es de igual importancia en la prevención secundaria del ictus. Del mismo modo, en la fibrilación auricular no valvular, una dosis ajustada de warfarina con una meta cociente internacional normalizado (INR) de entre 2 a 3 previene el ictus isquémico en pacientes de edad avanzada con un riesgo hemorrágico aceptable, pero todavía está bajo prescrito. Los agentes antiplaquetarios están indicados en pacientes de edad avanzada con trazos no embolico. Son pocos los estudios a gran escala han investigado el efecto de los inhibidores de la HMG-CoA reductasa (estatinas) en la prevención del ictus en individuos de edad. Hasta la fecha, los ensayos más grandes sugieren un efecto beneficioso para la prevención del ictus con el uso de estatinas en pacientes ancianos de alto riesgo <o = 82 años de edad. La endarterectomía carotídea se indica en la arteria carótida estenosis> 70% y los resultados son incluso mejores en los ancianos que en los pacientes más jóvenes. Sin embargo, el tratamiento médico sigue siendo el tratamiento de primera línea en pacientes ancianos asintomáticos con o = 75 años y esto podría contribuir a mejorar el estado de salud y calidad de vida en esta población en crecimiento.